La navidad no sólo es fiesta, alegría y felicidad, también tiene que ser un buen momento para reflexionar sobre nuestro espíritu y ver cómo estamos encaminados hacia la paz interior. Muchas veces olvidamos que la navidad es también una buena oportunidad para reencontrarnos con Dios de la mano de su hijo, Jesús.
Me gustaría no solo alentarles a que ofrenden unos minutos de su tiempo en la cena de navidad, sino que eleven sus oraciones más profundas a Jesús para que interceda por todos ustedes y sus seres queridos ante Dios y trate de llenarlos de toda la paz que él nos puede regalar.
Debemos recordar que para el catolicismo la Navidad no solo es un día de fiesta, como ya lo he mencionado, sino una temporada de reflexión, y de la misma forma que la Pascua, contiene un tiempo de preparación, llamado Adviento, que inicia cuatro domingos antes del 25 de diciembre.
Es costumbre que se celebren varias misas en Navidad, con distinto contenido según su horario. Así, la noche anterior (Nochebuena) aunque sea domingo, se reza la famosa Misa de Gallo o Misa de Medianoche; en algunos lugares hay incluso una Misa de la Aurora que se celebra precisamente al amanecer del 25 de diciembre. Y la Misa de Mediodía, en la que es costumbre que antes o después de ella, el Papa dé un mensaje de Navidad a todos los fieles del mundo, este mensaje es conocido como Urbi et Orbi (en latín: a la Ciudad de Roma y al Mundo).
Para inspirar nuestras almas de la mejor energía posible, he elaborado una Oracion espero que éste año 2010 les haya dejado ricos legados y además que comiencen el venidero año mejor aún con un espíritu positivo lleno de paz y amor.
Oración de Navidad
Señor, Dios, dueño del tiempo y de la eternidad,
tuyo es el hoy y el mañana, el pasado y el futuro.
Al terminar este año quiero darte gracias
por todo aquello que recibí de ti, con una oración de navidad.
Gracias por la vida y el amor, por las flores,
el aire y el sol, por la alegría y el dolor, por cuanto
fue posible y por lo que no pudo ser.
Te ofrezco cuanto hice en este año, el trabajo que
pude realizar y las cosas que pasaron por mis manos
y lo que con ellas pude construir.
Te presento a las personas que a lo largo de estos meses amé,
las amistades nuevas y los afectos más sinceros,
los más cercanos a mí y los que estén más lejos,
los que me dieron su mano y aquellos a los que pude ayudar,
con los que compartí la vida, el trabajo,
el dolor y la alegría, en esta oración de navidad.
Pero también, Señor hoy quiero pedirte perdón,
perdón por el tiempo perdido, por el dinero mal empleado,
por la palabra inútil y el amor desperdiciado.
En esta oración de Navidad quiero pedirte…
Perdón por las obras vacías y por el trabajo mal realizado,
y perdón por vivir sin entusiasmo .
También por la oración que poco a poco fui postergando,
y que hasta ahora vengo a poner en tu presencia.
Por todos mis olvidos, descuidos y silencios
nuevamente te pido perdón en esta oración de navidad.
En los próximos días iniciaremos un año nuevo,
y detengo mi vida ante el nuevo calendario
aún sin estrenar y te presento estos días con mi oración de navidad
que sólo TÚ sabes si llegaré a vivirlos…
Hoy te pido para mí y los míos la paz y la alegría,
la fuerza y la prudencia, la claridad, conciliación y la sabiduría;
Quiero vivir cada día del nuevo año con optimismo y bondad,
llevando a todas partes un corazón lleno
de comprensión y paz.
Cierra Señor, mis oídos a toda falsedad y mis labios
a la mentira, que no pronuncie yo palabras egoístas, mordaces o hirientes.
Abre en cambio mi ser a todo lo que es bueno
que mi espíritu sea lleno de toda bendición.
y que las emane a mi paso.
Con esta oración de navidad… Colmame de bondad y de alegría para que,
cuantos conviven conmigo o se acerquen a mí
encuentren en mi vida un poquito de tu dulce presencia
desde ahora y para siempre.
Danos un año feliz y enséñanos
a ser mejores cristianos cada día hasta encontrarnos en tu presencia.
Amén.
Patricia Núñez S., Teóloga PUC.